* Tras registrarse ligeras lloviznas en Atoyac, el ingeniero Federico Lorenzana plantea a productores de la región no confiarse.
Darío Lagunas // Corresponsal
El exdirector de Planeación y Fomento Económico de Atoyac de Álvarez e ingeniero agrónomo, Federico Lorenzana Arzeta, advirtió a productores de mango asentados en la región de la Costa Grande de Guerrero que no deben confiarse luego de observar el paso de algunas ligeras lloviznas que se dejaron sentir recientemente en esa región de la entidad.
Lorenzana Arzeta compartió a través de sus redes sociales que, aunque las lloviznas fueron leves, los productores no deben confiarse, y que en caso de que sus árboles aún tengan flores y frutos pequeños, se debe aplicar una mezcla compuesta por un fungicida y un bioestimulante.
"Amigo productor de mangos, aunque la llovizna fue leve, no te confíes. Si aún tienes flores y frutos pequeños, aplica la mezcla de Benomilo en dosis de tres gramos por litro de agua más 500 mililitros de Biozyme por 100 litros de agua. Si solo tienes frutos, aplica el Benomilo. Acidifica el agua antes de hacer la mezcla y, por último, agrega un adherente o bien detergente Roma. Haz la prueba del zacate y trata de hacer nebulizaciones dentro del follaje del árbol", recomendó.
De acuerdo con productores locales, las lluvias antes de tiempo pueden dañar los árboles de mango de varias maneras, afectando tanto la floración como la producción del mismo. Explicaron que si las precipitaciones ocurren durante la floración, las flores pueden dañarse y el polen ser lavado, limitando la polinización y reduciendo el vuelo de abejas y abejorros.
En panoramas más adversos, el Gobierno de México, a través de sus plataformas digitales, ha precisado que la saturación del suelo en caso de lluvias abundantes podría provocar una falta de oxígeno en las raíces, lo que estresa al mango y afecta su desarrollo. Además, el exceso de agua puede causar cuarteaduras en los frutos más desarrollados, afectando su calidad comercial.
Aunque las lluvias a destiempo pueden afectar los cultivos, no solo de mango, sino en gran parte de las cosechas del campo, son consideradas benéficas para recortar el periodo de estiaje para la ganadería, recargar los mantos freáticos y ayudar a reducir la incidencia de incendios forestales.
