* Encargado de despacho de Dirección de Bomberos, sugiere revisar periódicamente las condiciones del cableado eléctrico y mantener a bordo un extintor portátil.
* Origen de cortos en unidades tiene un 80% de responsabilidad en descuidos humanos, advierte el encargado de despacho de la Dirección de Bomberos de Acapulco.
Luego del registro de cuatro unidades automotrices incendiadas durante la mañana de este viernes, el encargado de despacho de la Dirección de bomberos de Acapulco, Raúl Noyola Rocha, confirmó que por lo menos tres de las cuatro unidades siniestradas y que fueron atendidas por los bomberos del municipio, presentaron alguna clase de corto circuito.
Noyola Rocha, informó que la unidad siniestrada en el bulevar de las naciones, fue atendida por personal de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil del Estado de Guerrero, misma que también se dio a conocer por parte de las autoridades de la mesa de coordinación para la paz, que presentó un incendio originado por fallas en el vehículo.
Con este contexto, el encargado de despacho del departamento de bomberos, Raúl Noyola, indicó que la mayoría de los cortos circuitos dentro de las unidades automotrices, tienen por lo menos un 80% de responsabilidad por el factor humano.
Cuestionado sobre las principales recomendaciones a los automovilistas para prevenir este tipo de incidencias, argumentó que, en ocasiones, se le hacen modificaciones a los vehículos para instalar equipos de sonido o bocinas sin el cableado adecuado, lo que puede generar sobrecalentamiento que genera algunos conatos de incendio.
Añadió que también se han dado casos en los que se dejan botes de aerosol dentro de las unidades con algún tipo de material combustible, que con el calentamiento, revientan y dan paso a alguna incidencia.
Además, explicó que también se recomienda tomar en cuenta el no instalar fusibles que sean de calibres inferiores al requerido por las unidades motrices, a fin de evitar sobrecalentamientos que propicien un conato de incendio dentro de los vehículos.
Finalmente, Raúl Noyola enfatizó que es necesario revisar las baterías de las unidades para comprobar que no estén infladas o sulfatadas en sus terminales, y sobre todo, tener siempre un extintor de polvo químico seco de un kilogramo a bordo del vehículo, para prevenir el avance en un eventual conato de incendio, con lo cual se puedan minimizar los daños en sus unidades.
