Expresó que ha tenido motivos personales e institucionales para cuestionar la postulación de Félix Salgado. En lo personal, por la forma en que infundada y cruelmente atacó el fin de su gobierno y posteriormente; lo otro en la manera en que gobernó a Acapulco.
López Rosas reconoció que tuvo callar una vez que Salgado Macedonio fue ratificado como candidato a principios de marzo, argumentando que no podía seguir impugnando al candidato de su partido puesto que si lo hacía caería en la incongruencia y hubiera tenido que emigrar de Morena, idea que no le convenció pues salir de su partido hubiera significado renunciar al proyecto en el que cree.
Pero ahora señala que su partido y simpatizantes han llegado al extremo por sostener una candidatura, que lo único que provocaría sería “romper la liga que se encuentra estirada”.
Señala que realizar una movilización por este tema, solo alterará la vida política del estado y pondrían en riesgo los triunfos de Morena.
El también aspirante a la gubernatura, expresó que él vivió represión política en sus aspiraciones pero por parte de gobiernos priistas, represión que no es igual a la que se está ejerciendo sobre Felix Salgado, ya que esta vez la persecución viene de mujeres que se dicen agraviadas.
Por lo que recalca que la mejor forma de recuperar la confianza de la sociedad sería que Salgado Macedonio renuncie a sus aspiraciones. Y pidió a sus seguidores que admitieran la realidad , que admitieran que están perdiendo lo más por lo menos.
